La comunidad parroquial

La comunidad parroquial:

• Tiene un núcleo vivo, que son las personas que sostienen las labores principales.
• Los laicos están integrados en grupos de formación. Son animados y acompañados por los misioneros de la Preciosa Sangre.
• Tras la pandemia, se reúne los martes para unirse a la llamada sinodal de la Iglesia universal a «caminar juntos» y ver cómo ir encarnando ese camino sinodal a nivel parroquial
  • hacer comunión de vida,
  • sentirnos un mismo Cuerpo,
  • celebrar que estamos juntos con Cristo,
  • abordar las tareas a las que la parroquia está llamada a hacer frente en su misión evangelizadora.
• Mantiene espacios de oración: Jueves 20:00.
• Celebra junta su fe en la Eucaristía, con un acento comunitario particular, los domingos a las 12:30. También hay Eucaristía a las 9:30.
• Se recoge para vivir su fe de un modo especial, mediante retiros en el comienzo de curso, Adviento, Cuaresma, y otros momentos que puedan surgir. También realiza cursos especiales de Formación.
• Celebra el sacramento de la Reconciliación varias veces al año, especialmente en tiempos fuertes.
• Además, tiene varios organismos de organización y planificación: el Consejo pastoral para dinamizar la vida parroquial. También está constituido el Consejo económico y el Consejo de obras, para la planificación de las obras parroquiales de reforma.
• Pretende ser una comunidad viva atenta a las necesidades sociales y espirituales de toda persona.